¿Para qué sirve la topografía?

La topografía es una ciencia muy útil e importante para diversos campos y actividades. Nos permite conocer y representar la forma y los detalles de la superficie terrestre, tanto los naturales como los artificiales.
Con la topografía podemos medir distancias, ángulos, alturas, áreas y volúmenes, y plasmarlos en mapas, planos y cartas.
La topografía tiene muchos objetivos y aplicaciones, entre los que se pueden mencionar:
Planificar y ejecutar proyectos de ingeniería civil, como carreteras, puentes, túneles, presas, edificios, etc.
Diseñar y gestionar obras de infraestructura, como redes de agua, alcantarillado, electricidad, telecomunicaciones, etc.
Explorar y explotar recursos naturales, como minerales, petróleo, gas, agua, etc.
Y la topografía también nos sirve para realizar diversos estudios:
- Ambientales: evaluación de impacto, monitoreo, conservación, etc.
- Geológicos: sismología, vulcanología, geomorfología, etc.
- Arqueológicos: localización, excavación, registro, etc.
- Geográficos: demografía, urbanismo, ordenamiento territorial, etc.
- Agrícolas: delimitación, parcelación, riego, etc.
- Forestales: inventario, manejo, aprovechamiento, etc.
- Catastrales: identificación, registro, valoración, etc.
- Jurídicos: propiedad, posesión, servidumbre, etc.
Como se puede ver, la topografía es una ciencia muy versátil y necesaria para el desarrollo y el bienestar de la sociedad.